Martin Gill retomó el mando de la Municipalidad de Villa María, organizó la agenda para los próximos 60 días. Tras la vuelta, no descartó cambios en el gabinete y explicó por qué no presentó un nuevo pedido de licencia.
Este martes 28 de diciembre Martín Gill regresó a ocupar su lugar como intendente de Villa María.
En una conferencia de prensa expresó: “Siento una inmensa alegría de regresar a la ciudad, porque uno de los mayores honores en mi vida política es ser intendente de Villa María”.
Y explicó que “preferimos no presentar el pedido de la licencia. No estaban dados los consensos y no quisimos que se siguiera dando un manoseo“.
En cuanto al cargo en Obras Públicas de la Nación dijo que “yo sabía que era un cargo temporal.
Yo tenía que trasladar el pedido del presidente a las autoridades locales y el fundamento era lo que hicimos en estos dos años como equipo de gestión”.
Y allí se refirió al respaldo: “entendemos los posicionamientos políticos. Hoy yo tengo como sentimiento, primero, una satisfacción por todo lo hecho.
Y luego, siento que hubo una decisión política de un sector de hacer hincapié en la licencia, el abandono, cuando en realidad tuvimos una tarea compartida”.
La vuelta de Gill
Aseguró que “junto a Pablo Rosso decidimos mi vuelta a la gestión. Con una agenda de grandes proyectos por alcanzar que implicarán años de gran crecimiento para toda la ciudad”.
Al respecto, señaló que en horas de la mañana se llevó adelante una reunión junto al Gabinete a los fines de trazar acciones para los próximos 60 días.
Por otra parte, aclaró que “no descarto la posibilidad de cambios de nombres y estructura en el municipio. El norte son los objetivos que nos hemos propuestos”.
