6 meriendas saludables para el inicio de clases: ¿Qué tener en cuenta?

La licenciada en Nutrición, Rocío Campos Páez, presenta opciones de meriendas saludables para todos los gustos para el inicio de clases presenciales.

La ansiada vuelta al colegio de los estudiantes de Villa María es acompañada por desayunos que se hacen entre dormidos, preparación de meriendas y viandas para los recreos.

Usualmente, se eligen las opciones más rápidas y fáciles para no demorar tanto tiempo en la tarea, pero lo cierto es que una alimentación saludable es esencial.

En una entrevista brindada a Villa María VIVO, Campos Páez destacó: “Los niños en edad escolar deben consumir una variedad de nutrientes sumamente importante tanto para su crecimiento como para su desarrollo neuro-madurativo y desempeño escolar“.

Entre estos nutrientes se deben incluir “proteínas, hidratos de carbono y grasas de buena calidad, como así también vitaminas y minerales”, comenzó marcando la licenciada.

La importancia de la alimentación saludable

“Un niño que no obtiene la cantidad suficiente de nutrientes, ya sea por una dieta deficiente, trastornos digestivos u otras enfermedades, puede presentar malnutrición, pudiendo ser por exceso o pérdida de peso”, aclaró la nutricionista.

Además, agregó que si no se tiene una alimentación saludable, “puede desencadenar en diferentes tipos de enfermedades y dificultad en su aprendizaje, siendo más propensos que un niño que tiene una alimentación variada, equilibrada y adecuada a su edad“.

Opciones de meriendas saludables

Para satisfacer las necesidades nutricionales de los niños en edad escolar, algunas opciones de meriendas saludables pueden ser:

  • 1. Budín de manzana con avena casero o de elaboración artesanal + una porción de frutas + queso cortado.
  • 2. Huevo hervido + grisines de harina integral con pastita de aceitunas casera.
  • 3. Puñado de frutos secos (nuez/almendra/maní/pasas de uva, etc.) + muffin de zanahoria con harina de garbanzo.
  • 4. Alfajores de harina de algarroba con dulce de leche (tipo maicena) + 1 fruta o variedades cortadas (banana, manzana, uva, naranja, kiwi, etc.)
  • 5. Bolitas de avena, cacao amargo y dulce de leche + porción de fruta + tostada con queso.
  • 6. Yogurt (de elaboración artesanal en lo posible) + quínoa inflada + porción de fruta.

Campos Páez aclara que las opciones brindadas son pensadas a nivel general, sin considerar la edad del niño, el tamaño de la porción, o si presenta alguna intolerancia alimentaria o patología que deba ser tenida en cuenta al momento de ofrecerle alimentos.

Asesoramiento nutricional y escuelas

La licenciada en Nutrición, remarcó: “Cada niño debe ser considerado y tratado de manera personalizada. En el caso de que necesiten asesoramiento nutricional, se realiza un trabajo en conjunto con los miembros de su familia“.

“Si bien el mayor aprendizaje lo absorben de su círculo más íntimo, una parte también es aprendida en la escuela, y de a poco se va teniendo en cuenta por parte de las instituciones, dando atención a la alimentación individual de cada sujeto”, subrayó Campos Páez.

Y, poniéndole peso a la responsabilidad educativa, continuó: “El entorno escolar moldea qué tan accesibles, deseables y convenientes son cierto tipo de alimentos durante la estancia de niñas, niños y adolescentes en la escuela“.

“Pero también es un espacio donde desarrollan hábitos que pueden durar toda su vida“, sentenció Campos Páez.

Finalmente, la nutricionista concluyo afirmando que, “es importante que estos entornos permitan y promuevan que estudiantes, familiares, autoridades educativas y maestros tomen decisiones de alimentación más saludables”.

Licenciada Campos Páez Rocío M. – M.P 4063
Corrientes 1382 – Villa María

AnteriorNueva convocatoria para muralistas y grafiteros
SiguienteManejaba haciendo zigzag y se había pasado de alcohol